Diosdado de Jesús Hernández Morera tiene 27 años. En el 2020, en pleno auge de la covid-19, se graduó en el Instituto de Relaciones Internacionales Raúl Roa García.Trabaja actualmente como funcionario político de la Dirección General de Asuntos Multilaterales y Derecho Internacional de la Cancillería de Cuba.
El joven diplomático defiende la tesis de que no hay un solo cubano o cubana que escape de los efectos del bloqueo económico y financiero que el gobierno de los Estados Unidos impone a Cuba. “Por su esencia y objetivos, no discrimina entre la población, pues, precisamente, el pueblo cubano ha sido y es su blanco de ataque”.
¿Qué defiende Cuba con la resolución sobre la necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos?
—El título de la resolución es definitorio y transmite un mensaje claro: “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”
“Con ella, Cuba defiende los principios y propósitos de la Carta de Naciones Unidas, en particular, la igualdad soberana de los Estados y la no injerencia en los asuntos internos. Se refiere, además, a otros principios recogidos en numerosos instrumentos jurídicos internacionales que se violan con el bloqueo como la libertad de comercio y navegación.
“Recuerda las declaraciones formuladas por los jefes de Estado y de Gobierno de la CELAC sobre la necesidad de poner fin al bloqueo, al tiempo que también toma nota de las declaraciones y resoluciones de distintos foros intergubernamentales, órganos y gobiernos que expresan el rechazo de la comunidad internacional al bloqueo. Asimismo, en el texto se cuestiona y se expresa preocupación por el carácter extraterritorial del bloqueo que lesiona la soberanía de otros Estados y afecta sus intereses legítimos.
“El documento también cita todas las resoluciones sobre este tema, adoptadas hasta este momento, y expresa preocupación porque a pesar de la aprobación de todas esas resoluciones, el bloqueo continúa vigente.
“Toma nota, además, de un informe que elabora el secretario general de las Naciones Unidas sobre el tema. Exhorta a levantar las medidas de carácter extraterritorial y violatorias del Derecho Internacional. Hace un llamado a derogar y dejar sin efecto esas medidas en el plazo más breve posible.
“Finalmente, el propio texto de la resolución plantea un seguimiento al tema al pedir al secretario general de la ONU que prepare un nuevo informe sobre el cumplimiento de la resolución, al tiempo que mantiene esta cuestión dentro de la agenda del próximo período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU)”.
¿Qué significa para Cuba volver a someter a votación en Naciones Unidas esta resolución?
-Someter a votación esta resolución en Naciones Unidas es un ejercicio sumamente necesario. En primer lugar, porque el bloqueo persiste, incluso a niveles extremos e inéditos luego de su recrudecimiento sin precedentes durante el gobierno del expresidente Donald Trump, y con efectos redoblados en el contexto de enfrentamiento y recuperación post-pandemia.
“Es una oportunidad única para la realización de un debate de suma calidad que antecede y da paso a la votación de la resolución, donde más de cuarenta países y grupos de países intervienen tradicionalmente y expresan su apoyo inequívoco a Cuba en su justo reclamo, que es también el reclamo de la inmensa mayoría de la comunidad internacional.
“Ninguna resolución en Naciones Unidas llama a los Estados Unidos directamente por su nombre en su propio título, excepto la nuestra. Su presentación y aprobación le envía un mensaje claro: su política de bloqueo hacia Cuba es anacrónica, los aísla y concita el rechazo de prácticamente todos los países del mundo.
“Es un ejercicio importante también para nuestro pueblo, un acicate para seguir adelante a pesar de las vicisitudes y los efectos de este bloqueo agravado. Nos demuestra que no estamos solos en este reclamo de elemental justicia y que año tras año, la comunidad internacional sigue considerando el bloqueo a Cuba como un tema prioritario y como una política que debe ser levantada de una vez por el bien de todos”.
Son muchas las veces que el mundo ha estado a favor de Cuba, casi por unanimidad, y el bloqueo continúa. ¿Cómo favorece al país este resultado, aun cuando el bloqueo sigue?
-No puede subestimarse en modo alguno el poderoso mensaje político y ético que envía la Asamblea General de las Naciones Unidas para los pueblos del mundo, para el pueblo cubano y para los propios Estados Unidos, al aprobar año tras año esta resolución de manera inequívoca.
“Es una prueba fehaciente de que la causa de Cuba goza de reconocimiento mundial, da fe de la justeza de lo que en ella se reclama. Es la aceptación de que el bloqueo es real, que no existe basamento legal ni moral alguno para su mantenimiento y muestra une vez más el aislamiento incómodo de los Estados Unidos en este tema.
“Es la demostración práctica de que el bloqueo no es un asunto bilateral y que su alcance y aplicación impacta a todos.
“Esta es una resolución relevante, lo que se demuestra en su permanencia año tras año en el clúster “Mantenimiento de la paz y seguridad internacionales” de la agenda de la Asamblea General. Es un ejercicio muy esperado en ONU. Pocas resoluciones, para no ser absolutos, logran aglutinar un apoyo como el que recibe Cuba en esta votación”.
¿Cuánto le afecta el bloqueo?
—Los propios documentos fundacionales de esta política refieren que su objetivo es generar hambre, precariedad, desesperación, deteriorar los salarios reales y alentar al descontento que conduzca al descrédito del gobierno y su eventual derrocamiento.
“El bloqueo limita los proyectos de vida de cualquier joven cubano y sus aspiraciones legítimas a desarrollarse dentro de una sociedad que los ha formado ética y profesionalmente con estándares de educación similares a países desarrollados.
“El bloqueo impide a los jóvenes cubanos explotar todas sus potencialidades y todo el aporte que pudieran brindar a la sociedad de no existir semejantes condiciones de hostigamiento externo. Se refleja en las dificultades en el transporte, el acceso a medicamentos, alimentos e, incluso, en la posibilidad de acceder a una vivienda propia en medio de las dificultades financieras y materiales que genera esta política.
“Son cuestiones que no dejan de tener un impacto directo en la vida de cada joven cubano. Sin embargo, en este mismo contexto, tenemos una meridiana convicción, y es que los jóvenes somos también ese acicate para sobreponernos a esta hostilidad e impulsar de una vez, con nuevos ímpetus, respuestas a los graves problemas que nos ha generado el bloqueo, aun en el escenario en el que se mantenga en pleno vigor”.
¿Cuáles son sus expectativas con esta nueva votación?
-Esta será la trigésima primera ocasión en que la AGNU debatirá y se pronunciará sobre el bloqueo contra Cuba. Lo hará en medio de una crisis global multidimensional con efectos socioeconómicos persistentes de la covid-19, en la que Cuba ha debido enfrentar, adicionalmente, el recrudecimiento sin precedentes del bloqueo y su arbitraria e injusta inclusión en la Lista de Estados que supuestamente patrocinan el terrorismo.
“Se espera la participación de un alto número de países de todas las regiones y de agrupaciones de países en el debate sobre el tema. Confiamos en continuar contando con el apoyo abrumador de la inmensa mayoría de la comunidad internacional en nuestro legítimo reclamo de poner fin a esta política inhumana, un respaldo que se ha consolidado a lo largo de los años”.
